Según el sindicato UGT
los infartos y derrames cerebrales se consolidan como la primera causa de muerte laboral.
Los datos de accidentes de trabajo, en los 10 primeros meses del año 2016, vuelven a constatar la tendencia alcista de la siniestralidad laboral. Se produjeron más de un millón de accidentes relacionados con el trabajo y murieron 509 personas, 184 de ellas a causa de infartos y derrames cerebrales, lo que representa más de un tercio del total y consolidándose como la primera causa de mortalidad laboral. Estas patologías no traumáticas se vinculan a los riesgos psicosociales, como el estrés.
En los diez primeros meses del año se han producido 464.086 accidentes que han causado la baja del trabajador, son 30.957 más (un 7,1%) que en el mismo periodo de 2015. Por otra parte, se han notificado 614.805 accidentes sin baja, 18.378 más que en 2015, lo que supone un incremento del 3,1%.
Entre los accidentes que han causado baja,
401.918 se han producido durante la jornada laboral, aumentando los mismos en 26.528 (un 7,1%), mientras que 62.168 fueron in itínere (4.429 más que los notificados hasta octubre de 2015, un 7,7%).
La causa más frecuente de accidentes durante la jornada laboral continúan siendo los
sobreesfuerzos físicos sobre el sistema
musculoesquelético.
De las 509 personas que perdieron la vida por motivo del trabajo (2 menos que en el mismo periodo de 2015), 184 fallecieron por infartos y derrames cerebrales, la primera causa de mortalidad laboral. UGT alerta sobre el aumento de estas patologías no traumáticas que se vinculan a riesgos psicosociales como el estrés. Riesgos que a su vez tienen su caldo de cultivo en un mercado laboral cada vez más inestable y precario.
Según nos muestran las sucesivas Encuestas Europeas de Condiciones de Trabajo, un gran volumen de trabajo y/o estar sometido a mucha presión, es algo muy común entre la población trabajadora europea. La falta de control sobre el trabajo y el escaso apoyo social también son comunes, y las mujeres trabajan más a tiempo parcial que los hombres. Más de la mitad de los trabajadores europeos informan de que el estrés es común en su lugar de trabajo.
Fuente:
PREVENCIONAR