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La inversión en medidas que reducen la siniestralidad en el trabajo ayuda a reducir el absentismo laboral y el ausentismo, al tiempo que ayuda a reducir los costes y genera compañías más saludables

Relacionar la Prevención de Riesgos Laborales (PRL) con conceptos positivos como los beneficios empresariales, la salud y la inversión de futuro. Esta fue una de las principales conclusiones del Congreso Prevencionar que, celebrado el pasado mes de octubre en Madrid, expuso la necesidad de crear una conciencia social sobre la prevención de riesgos laborales en España y continuar mejorando en esta materia a pesar del gran avance que se ha registrado en los últimos años.

Al respecto, los expertos participantes en el evento lamentaron que la prevención de riesgos laborales aún es un tema pendiente en las empresas y enfatizaron que, más de 20 años después de la aprobación de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales en España, «todavía es un concepto que los empresarios vinculan con «daño, pérdidas y gasto». Por ello, uno de los principales objetivos para mejorar la situación actual se debe centrar en la formación e implicación de los empresarios.

Precisamente esta es una de las principales conclusiones reflejadas en la I Encuesta realizada en España a Técnicos de Prevención de Riesgos Laborales, una profesión que nació hace 20 años con el Reglamento de los Servicios de Prevención (Real Decreto 39/1997), donde el Capítulo VI incorpora la descripción de las funciones de los Técnicos de Prevención de Riesgos Laborales (TPRL). Según explican estos profesionales en la encuesta «por parte del empresario se echa en falta su involucración», al tiempo que consideran que esto se debe «a una falta de conocimiento (se requiere mayor formación hacia el empresario) y en una inexistente relación entre la prevención de riesgos laborales y los intereses económicos de la empresa».

En cuanto a los beneficios que le aporta a la empresa, un informe de la Asociación Española para la Calidad estima que por cada euro invertido en esta materia el rendimiento es de 2,2 euros.

Por ello, los técnicos requieren «una mayor actividad formativa hacia los empresarios y los trabajadores», una formación que debe ser «práctica y que cuente con la colaboración de la empresa como elemento fundamental para el éxito de la misma y la consecución de la integración de la PRL». Además y para mejorar, los técnicos consideran fundamental incidir en «la relación con las necesidades de la empresa, ahondando en la implicación de los propios trabajadores, una implicación que es también muy reducida y que está influenciada por la mala información que se les traslada».

Y es que el incremento del empleo y de la producción conlleva un aumento de los riesgos laborales, ya que más personas trabajando y una mayor actividad productiva puede implicar más posibilidades de enfermedades profesionales y de riesgos laborales. Asimismo, el riesgo es mayor cuando menor es la experiencia laboral, por lo que los técnicos defienden por la implantación de una estrategia para mejorar su formación.


Organizaciones más saludables

La apuesta por la prevención de riesgos laborales y la adecuada gestión de las emociones puede ayudar a que los empleados disfruten de organizaciones mucho más saludables y productivas gracias a un asesoramiento en materia preventiva integral. La consecución de esta realidad incrementaría los beneficios económicos para las instituciones, ya que se reduciría el absentismo laboral y del ausentismo, disminuyendo también los costes por siniestralidad, entre otros.

Asimismo, la integración de las personas con cualquier tipo de discapacidad y la inversión en diseño psicosocial también son áreas para mejorar la productividad que unido a una correcta gestión de las obligaciones legales de las empresas y a la valoración de la coordinación de seguridad y salud reduciría al máximo la siniestralidad laboral e incrementaría la rentabilidad social de las empresas.

Por ello, el presidente de AEC, entidad organizadora del IV Congreso Nacional de Prevención de Riesgos Laborales celebrado el pasado mes de septiembre en Valladolid, Miguel Udaondo, opinó en este evento que la prevención de riesgos laborales tiene que estar integrada plenamente en las actividades de las empresas y constituir uno de los pilares de la gestión empresarial.

FUENTE: Diario Información