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Generalmente, cuando una persona es adicta a determinadas sustancias nocivas para su salud -ya se alcohol o drogas- no suele plantearse, como motivo principal del consumo de las misma, el trabajo que viene desarrollando. 

Debemos empezar a ser conscientes de nuestro empleo puede ser, o una causa desencadenante a esa dependencia, o un motivo de cronificación de una dependencia anterior. Sea como fuere, resulta preciso atender a aquellos factores de riesgo que pueden comportar el desarrollo de estas conductas y adoptar medidas preventivas para evitar su aparición. 

1. Condiciones climatológicas 

1.1. Las tareas al aire libre 

Las personas que realizan tareas al aire libre suelen tener una mayor predisposición a consumir bebidas como el alcohol y el café para mitigar el frío y calmar la sed. Además, por la dureza de las propias actividades ejecutadas, en numerosas ocasiones recurren al consumo del tabaco. 

Las posibles medidas a adoptar se centran en suplir las carencias que pretenden mitigarse con el abuso de estas sustancias. Por tanto es importante: 

- Prestar ropa adecuada al entorno en el que se desempeñan esos trabajos.

- Crear espacios para que, en condiciones de clima desfavorable, los trabajadores puedan encontrar resguardo. 

- Prohibir el consumo de trabajo en las instalaciones de la empresa o sus alrededores.

- Ofrecer equipos de trabajo adecuados. 

- Formar a los empleados para saber cómo deben proceder ante temperaturas extremas. 

- Dotar de instalaciones y maquinaria que permitan mitigar la sed y el frío de una manera saludable. 

1.2. La temperatura

Mientras que el calor extremo conlleva que los trabajadores consuman sustancias estimulantes para no verse achacados por la fatiga; el frío comporta la ingesta de bebidas alcohólicas con una mayor graduación. 

Algunas acciones para reducir este factor de riesgo son: 

- Reducir el tiempo durante el que el trabajador se encuentre expuesto a dichas temperaturas. 

- Establecer sistemas de ventilación adecuados. 

- Que dispongan de equipos de trabajo adecuados, que ayuden a regular la temperatura corporal. 

1.3 Contaminación acústica

En los puestos de trabajos donde, por el empleo de maquinaria o desarrollo de la propia actividad, se generan grandes niveles de ruido, los empleados tienen un mayor riesgo de sufrir estrés y otros trastornos nerviosos como irritabilidad, insomnio etc. Por ello, en numerosas ocasiones se suele acudir a la ingesta de fármacos que ayuden a paliar dichas patologías. 

Las medidas preventivas que se pueden adoptar son: 

- Actuar sobre el origen del ruido, sustituyendo, por ejemplo, la maquinaria antigua por una más actual que no emita tanto ruido. 

- Dotar al personal de instrumentos adecuados para que puedan desarrollar sus tareas aislados del ruido. 

- Aislamiento de la maquinaria ruidosa

- Limitar el tiempo de exposición del trabajador a estos ruidos, realizando pausas cuando sea necesario. 

2. Condiciones laborales

2.1. El entorno de trabajo

El mal el estado de las instalaciones, la falta de limpieza en el lugar de trabajo o la inadecuación de los equipos individuales a los que se les dota a los empleados, unido con una ingesta de alcohol o drogas, puede ser la chispa que comporte males mayores como traumatismos, heridas… 

Así mismo, aquellos puestos de trabajo que se vengan desarrollando en las alturas, deben estar dotados de el material preventivo necesario y, el abuso del alcohol, en tanto que actúa como un inhibidor del peligro y el riesgo, puede comportar a un uso nulo de estos equipos -aunque estén a disposición del trabajador-. 

Por ello es importante: 

- Formar e informar a los trabajadores en el plano de la PRL.

- Mantener el lugar de trabajo ordenado y limpio.

- Disponer de una iluminación adecuada, sobretodo en las vías de paso. 

2.2. Organización de la jornada laboral

La organización de la jornada laboral, así como la extensión o reparto de la misma, influye directamente en nuestro estado anímico, pudiendo desarrollarse sintomatologías propias del estrés, depresión, fatiga o sobrecarga mental. 

Los trabajos nocturnos son los que mayores factores de riesgo presentan, ya que éstos comportan trastornos del sueño, irritabilidad, cambios de humor, fatiga e incluso problemas cardiovasculares. resulta muy habitual que los trabajadores nocturnos tomen sustancias excitantes para poder paliar con el cansancio, así como relajantes para poder conciliar el sueño. 

Así mismo, aquellas tareas que se desempeñan bajo el sistema de producción en cadena, provoca fatiga mental y física, carga física, problemas musculares y traumatológicos etc. como consecuencia, muchos de estos trabajadores deben recurrir a fármacos que les permitan soportar y mitigar tales dolores. 

3. Condiciones psicosociales 

3.1. Estrés laboral

El estrés laboral aparece cuando las personas se encuentran presionadas a cumplir determinados objetivos o expectativas, superando la capacidad de las mismas a hacerles frente. 

Aunque el estrés no sea considerado como enfermedad, su aparición puede comportar el desarrollo de otros muchos trastornos mentales y físicos como, por ejemplo, depresión, ansiedad, enfermedades cardíacas… 

Algunas medidas para combatir contra el estrés laboral son: 

- Marcar como meta la consecución de objetivos reales.

- Introducir incentivos para que los trabajadores dispongan de una motivación extra a la hora de desempeñar sus tareas. 

- Establecer una carga de trabajo adecuada a las capacidades de cada trabajador. 

3.2. Violencia laboral

La violencia en el trabajo es una cuestión a la que no se le presta la atención que merece. 

En términos generales, la violencia en el trabajo se identifica con el acoso -en todas sus dimensiones-, entendiéndose como toda conducta negativa entre compañeros de trabajos o entre superiores y subordinados, como consecuencia de la cual la persona contra la que se ejerce, de forma reiterada, es ofendida, humillada e intimidada en su ambiente laboral por otra u otras -Prevención de consumo del Alcohol en el Trabajo, Comisión Ejecutiva Confederal de UGT-. 

Así pues, el sometimiento a un acoso continuo puede derivar en que la persona, achacada por la tristeza, depresión, ansiedad… acuda a fármacos o sustancias que permitan evadirse de la realidad que padece diariamente. 

Para evitar que se produzcan tales situaciones, es importante que la empresa cuente con protocolos contra la violencia en el trabajo y someta a sus empleados a formaciones continuas sobre el tema. 

Protege la salud y la seguridad de tu empresa 

Como ves, la solución para evitar el abuso del alcohol y las drogas en los puestos de trabajo pasa por apostar por una buena estrategia preventiva, aplicando las medidas en PRL dirigidas a eliminar los factores de riesgo.

Xavier Pladevall